No pudo ser

El FC Cartagena AD Algar Surmenor no estará en la gran final de la Copa Princesa de voleibol femenino al perder en Gran Canaria ante Melilla en semifinales por 3-1, en un partido donde tuvo cerca haber empatado a dos sets. El equipo de André Collin luchará ahora por conseguir el tercer puesto el domingo.



No empezó bien el partido con un 3-0 adverso que dio el mando a Melilla, que amplió su ventaja (11-5) y, aunque las algareñas nunca se rindieron, llegando a empatar a 14 puntos, nunca estuvieron por delante. El 20-16 volvió a poner el objetivo de anotarse el primer set muy cuesta arriba, como así fue (25-19). El segundo asalto fue con alternativas hasta el 10-7. A partir de ahí, otra vez a rebufo en el marcador, terminado con 25-22. Otra vez, como el día anterior ante el Barça, el panorama era muy negativo, aunque esta vez, quizás, estaba el hecho de que las melillenses habían jugado por la mañana, con lo que el capítulo físico podría pasarles factura si se alargaba el partido. El segundo clasificado del Grupo B de la SF2 estaba doblegando al líder del Grupo C, pero 'hasta el rabo todo es toro' y las algareñas tienen muy asimilado eso de 'rendirse nunca, retirarse jamás'.

El tercer set volvió a arrancar con alternativas e igualdad, sucediéndose los empates en el electrónico, casi siempre con mínima ventaja melillense hasta que llegó el 13-14 que obligó al técnico de Melilla a parar el partido con 'tiempo muerto' ante un FC Cartagena AD Algar Surmenor que recuperaba sensaciones buenas. Continuaron las igualadas en el tanteador y llegó el arreón cartagenero (16-20, 17-22 y 18-23). El partido, que seguía ofreciendo puntos muy bellos y competidos, no estaba decidido y un parcial de 5-0 puso el empate a 23, echando por tierra la ventaja de las chicas de André Collin, quien agotó dos 'tiempos muertos' casi seguidos. Un buen bloqueo y un contundente remate de Parker Emma Diane dejaron todo en un susto y en el esperanzador 2-1 global.

Cuarto asalto con igualdad hasta el 7-9, que genera el primer 'tiempo muerto' melillense solicitado por el entrenador argentino Flavio Calafell, que no impidió el 7-10 siguiente y un 9-13 que reflejaba que las algareñas iban a más, pero también que quedaba mucho para hacer, como recordaron los empates a sucesivos desde el 14-14 al 19-19 puntos, además de ver otra vez a Melilla arriba (19-18). Recuperó el mando Cartagena (20-22) cuando se acercaba el final, pero fue efímero al responder Melilla de forma contundente (25-22). Estuvo cerca, pero no pudo ser.  

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